En esta serie estoy compartiendo principios fuera de lo común, inusuales, extraños y no espero que todo mundo la capte, porque la mayor parte de gente tiene una mente comun, y por eso es que sus resultados son comunes.
Pero, para salir del montón debes dejar de pensar como todos, porque si sigues pensando igual a los demás, tendrás los resultados de la mayoría.
El poder de la DISCIPLINA
En Proverbios 15:32 dice: “El que tiene en poco la disciplina menosprecia su alma; mas el que escucha la corrección tiene entendimiento”.
"la Disciplina, es La capacidad de hacer lo que se debe hacer y cuando se debe hacer, nos guste o no."
7 aspectos que debes disciplinar en tu vida
1. Disciplina tu Conversación.
Habla siempre en términos positivos, desde una posición de fe y con el conocimiento de lo que Dios quiere de ti. Evita las palabras negativas tales como, “no puedo...soy débil...siempre fracaso.”
Jesus nos enseño a hablarle a las montañas: quizás tu montaña es una enfermedad, un negocio en quiebra, un problema... Cómo te presentas ante dios? te quejas de lo grande de tu montaña?
Deja de hablarle a Dios sobre cuan grande es tu montaña
y comienza a hablarle a tu montaña sobre cuan grande es tu Dios.
2. Disciplina tus hábitos de lectura.
La lectura te hará mas sabio. Qué libro estás leyendo actualmente? te invito a que te propongas leer. Selecciona tus lecturas, tus libros, que sirvan para tu crecimiento personal.
Asegúrate que en tus lecturas, también pases por lo menos diez minutos cada mañana con la Palabra de Dios.
No hay posibilidad de vivir la verdaderamente victoriosa, vida feliz, estando apartado del contacto diario con las Escrituras.
3. Disciplina tu vida de oración.
Orar es hablar con Dios, de tú a tú, como le habla un hijo a un padre.
• La oración es la elevación del alma hacia Dios y la petición de lo que se necesita de Dios.
• La oración es la elevación de nuestro corazón a Dios.
• La oración es el reconocimiento de nuestros límites y de nuestra dependencia: venimos de Dios, somos de Dios y retornamos a Dios.
La oración es, ante todo, un acto de inteligencia, un sentimiento de humildad y reconocimiento, una actitud de confianza y de abandono en Aquel que nos ha dado la vida por amor.
4. Disciplina tus amistades.
Rehusa asociarte con perdedores, pesimistas, negativos, que te tiren abajo. Elige amigos que serán la clase de asociados con los cuales te gustaría pasar toda tu vida.
Ama a todo el mundo, pero no trabajes con todo el mundo.
5.- Disciplina su carácter
(Prv 16:32)
“Mejor es el que tarde se aíra que el fuerte; y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.”
Tú no puedes controlar el semáforo en rojo, pero puedes controlar tu reacción.