El libro de Números continúa la narrativa de los hijos de Israel después de su salida de Egipto y su travesía por el desierto. Se inicia con un censo detallado de las tribus israelitas, preparándolas para la distribución de la tierra prometida. Durante su viaje, enfrentan diversos desafíos, como la escasez de alimentos y agua, lo que provoca quejas y rebeliones contra Moisés y Aarón, los líderes designados por Dios.
A pesar de las dificultades, Dios manifiesta su presencia y poder mediante señales y milagros. Provee maná y codornices para sustento, y realiza el milagro del agua de la roca para saciar la sed del pueblo. También se establecen leyes y regulaciones importantes que abarcan el sacrificio de animales, la pureza ritual y la conducta ética.
El libro de Números revela la complejidad de mantener una comunidad organizada y obediente en circunstancias adversas. Destaca la fidelidad y paciencia de Dios hacia su pueblo a pesar de sus quejas y rebeliones. A medida que los hijos de Israel se preparan para ingresar a la tierra prometida, se destacan las lecciones aprendidas y los desafíos superados durante su travesía por el desierto.